jueves, 8 de abril de 2010

Sinopsis Gabriela

Blancanievex


La protagonista de mi corto es también la protagonista de una película porno. Está desencantada del mundo tal y como ella lo conoce. Un mundo de sexo sin amor, de golpes secos sin caricias, un mundo frío en el que los gemidos no son gritos de placer si no de ayuda.
La protagonista acaba su escena y decide abandonar ese trabajo. Se despide y coge el coche para irse a casa. Con el coche se mete en un túnel de limpieza. Borrón y cuenta nueva. La dieta de la purificación, limpiar el coche y empezar una nueva vida.
Una nueva vida en todos los sentidos, necesita calor, orden y estabilidad. Tiene que encontrar a alguien que cuide de ella. Quiere y desea un amor arrebatador pero no sabe ni por dónde empezar a buscar. Ha perdido la fe en el mundo. Se acaba el lavado del coche y continúa su camino a casa. Ahora, vemos pequeños defectos de la protagonista mientras narra una historia. La narra ella pero mediante una voz en off, no la vemos a ella hablando porque no nos habla desde ese presente. Cuenta una historia de un bebé de gato que también se siente desnudo y sólo en un mundo cruel. Su madre no lo quiere, no puede darle su amor, y el bebé necesita también alguien que cuide de él. Así que se escapa en busca de algo mejor. (nota: no sé si descubrir desde este punto de la historia que el personaje que se escapa es un gato o dejarlo para el encuentro final).
Semáforo en rojo. El mundo es engañoso y frágil. Hay grietas por donde se escapa la belleza natural. Hay grietas por donde se escapa la esperanza de la protagonista que ya no cree en nadie. Vive una escena ridícula y triste. Un niño con un globo y un viejito con un puro cruzan en sentidos contrarios. Con una mala suerte terrible, el globo del niño explota al hacer contacto con el puro del viejo. El mundo se ha vuelto loco, y la protagonista también. Llora. Semáforo en verde. Gira y entra en su calle. Frena.
Los dos personajes, sombríos, abandonados, necesitados, se encuentran de forma trágica. Ella casi atropella al bebé gato, a dos pasos de su casa. No está herido pero sí muy débil y asustado. A toda prisa, ella lo lleva en brazos hasta su cocina. Le da un cuenco de leche y lo acaricia. Mira a cámara y canta una canción que va sobre el amor. Una canción que pronostica un futuro esperanzador, una canción que explica la maravilla de un encuentro como este, entre dos personajes como estos.

3 comentarios:

  1. Me ha encantado tu historia. Sobre todo, los simbolismos que has introducido y ese final esperanzador y prometedoramente feliz.

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  2. A mi también me ha gustado, pero veo complicado llevarlo a la pantalla, con los medios disponibles actualmente.

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  3. Me gustan las imágenes: la escena del túnel de lavado, la del anciano y el niño...
    Se identifican muy bien las fases de la narración que tenemos como modelo.
    Sin embargo, las escenas que planteas se me antojan muy apresuradas... una transición demasiado rápida desde la actitud optimista de "empezar desde cero" al regreso al desengaño y la desesperanza. Creo que lo bueno sería dar mucha fuerza a la narración en off, planteándola más bien como un intenso y lírico discurso dentro de la cabeza de la protagonista, solo interrumpido por los sucesos que introducen cambios en su actitud (como es el plot point del anciano y el niño del globo). No sé si es lo que tenías en mente.
    Me gusta la idea y, la verdad, no lo veo complicado de realizar a menos que quieras que el gatito hable.

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